Ciudad de México, 26 de mayo de 2025 — Aunque se han logrado avances importantes en la participación política de las mujeres en México, su inclusión en el ámbito económico sigue enfrentando grandes desafíos.
Actualmente, sólo el 46.1% de las mujeres forma parte del mercado laboral, una cifra significativamente menor en comparación con los hombres y con el promedio de países miembros de la OCDE.
Un factor clave es el trabajo doméstico y de cuidado, que realizan mayoritariamente las mujeres y que representa cerca del 26% del Producto Interno Bruto nacional. Sin embargo, estas tareas no son remuneradas ni reconocidas formalmente, lo que limita la autonomía económica femenina.
Además, la brecha salarial se mantiene, con mujeres ganando en promedio 85 pesos por cada 100 pesos que perciben los hombres, aun cuando cuentan con niveles educativos similares o superiores.
Expertas en economía y género advierten que para lograr una verdadera equidad es indispensable diseñar políticas públicas que reconozcan el valor del trabajo no remunerado, fomenten la corresponsabilidad en el hogar y eliminen las barreras que dificultan el acceso y permanencia de las mujeres en empleos formales y bien remunerados.
De acuerdo con estudios, si México alcanzara la tasa promedio de participación económica femenina de la OCDE, el país podría aumentar su Producto Interno Bruto en casi 7 billones de pesos en la próxima década, lo que representaría un impulso significativo para el desarrollo nacional.
En resumen, aunque se han dado pasos importantes, el camino hacia la igualdad económica de las mujeres en México aún es largo y requiere compromiso y acciones concretas.